Thursday, September 27, 2007

jueves 27 de septiembre

Hace un año abría este Blog con una pequeña crónica sobre los personajes extraños que cada septiembre toman la ciudad. Los convoca el festival de rock Metal HG y en esta ocasión también el décimo aniversario de la banda holguinera Mephisto.

Cada septiembre además regresan las lluvias y escuchar música de altos decibeles, organizar un espectáculo con todos los requerimientos de la cultura rock, se vuelve más difícil por su causa.

Este año, huyéndole a la lluvia, las bandas y rockers de todas partes del país encontraron refugio en el Templo de la Cubanía: la Sandunguera, un espacio que ayudó a mejorar la calidad del sonido en las presentaciones.

Hubo mucho público, los amantes de este género están ávidos de lugares donde escuchar la música que les gusta, donde debatir los temas que les atañen, donde compartir las experiencias vividas por quienes habitan en distintas ciudades de la Isla. Gracias a eso. Porque de ser por la escasa promoción que acompañó a esta edición del festival, o por los diluvios de esos días, habrían pasado inadvertidos sus excelentes conciertos.

Fue bueno el Metal HG, dicen algunos; sin embargo a quienes amamos el rock nos preocupa que el espacio teórico de esta fiesta vaya perdiendo peso y seriedad, que haya cada vez más seguidores de la “moda” rocker o de la música más comercial dentro del género, y menos admiradores por conocimiento.

Esta es una reflexión que deben hacer sus organizadores, fundamentalmente la AHS de Holguín, porque de continuar con esa tendencia se perdería una parte importante de este evento, una de sus razones de ser, y se estaría desaprovechando una oportunidad única de ganar espacios y aceptación en la sociedad, que tantas veces ha rechazado a los rockeros tildándolos de rebeldes sin causa y enajenados.

Bienvenidos serán siempre septiembre, las lluvias y Metal HG, pero que sea con buena salud.